Hoy el resultado iba a ser muy parecido al de los dos partidos anteriores, una goleada abundante la cual para nada merecíamos.

Salimos al partido con intensidad, aguantando con el empate, pero tras errores nuestros, consiguen hacer el primero y una vez que cae uno, de seguido los demás.

Aun así, hubo ratos en los que estuvimos enchufados, con ganas de intentar cosas, incluso teniendo una ocasión clarísima de gol, pero que no tuvimos esa suerte de cara a puerta.

Siempre hay algo positivo con lo que quedarse de un partido así, y es, que los niños en ningún momento dejaron de correr, de trabajar y mucho menos de aprender.

¡Siempre orgullosos de ellos!